En la tercera fecha le ganó a Central por 2-0 pero la clasificación dependía de un milagro, ya que necesitaba que Cruzeiro pierda ante Central y luego ganarle al equipo brazuca en la última fecha. Eso fue precisamente lo que ocurrió, ya que obtuvo una mano de Central, que le ganó a Cruzeiro. En última fecha necesitó hacer 3 goles para pasar a la final, y se produjo el batacazo; con goles de Pavoni de penal, Bertoni y Ruiz Moreno le quitó el primer puesto del grupo a Cruzeiro y avanzó a su cuarta final de América consecutiva.